Enseñando buenos modales

Una persona con buenos modales es alguien que demuestra respeto hacia los demás y es consciente de los sentimientos ajenos. Como padres, una de nuestras metas es criar niños que sean considerados atentos y educados. Pero en un mundo en el que muchas veces los valores y los modales ya no son parte de la educación en las escuelas, tenemos que ser los papás los que debemos enseñarles cómo comportarse en ciertas situaciones aunque a veces sea difícil.

Todo empieza con el ejemplo

Los expertos confirman que, desde bebés, nuestros hijos observan nuestro comportamiento y tratan de imitarlo. Aquí te daremos algunos ejemplos de maneras en que puedes demostrar respeto por los demás y a la vez dar un ejemplo constante a tus hijos:

• Usa palabras de cortesía, como “gracias” y “por favor”
• Pide disculpas cuando sea necesario
• Sé agradecida
• Pon atención a las necesidades de los demás (por ejemplo, sostén la puerta para que pase la persona que viene atrás tuyo y siempre ofrece tu ayuda aunque no te la pidan)

En casa es donde debes empezar

Todo momento que estés con tus hijos es un momento de aprendizaje.  Pero asegúrate de darles suficientes oportunidades de práctica en tu hogar: haz una cena bonita en casa o llévalos a lugares donde podrán ver tu trato hacia los demás y donde podrán poner sus (buenas) costumbres en práctica.

También comienza por practicar en casa lo que te gustaría que hagan cuando estén fuera. Cada vez que veas algo que necesita ser modificado, aunque estén en familia, diles cuál es la forma correcta de hacerlo en términos concisos.

Dependiendo de la edad de tu hijo, debes adaptar la manera de explicarle lo que es correcto y cortés. En general, hay que ser prácticos y concretos a la hora de platicar el tema con los niños, para que entiendan qué esperas de ellos. Y maneja tus expectativas: no asumas que cambiarás todo en unos minutos. Este es un trabajo constante.

Buenos ejemplos

Estos son algunos ejemplos de buenos comportamientos que puedes practicar mientras están en familia:

• Saludar a todos cada vez que lleguen (y despedirse al partir)
• Esperar su turno antes de hablar
• Comer con buenos modales (por ejemplo, mantener la boca cerrada al masticar)
• Ayudar con los quehaceres del hogar

Es muy importante que nuestros hijos sean niños atentos, que demuestren cortesía porque eso les abrirá muchas puertas en el futuro.  Y si están acostumbrados a ser así en su propio hogar será mucho más fácil que hagan lo mismo cuando estén en otro lugar. ¡La educación comienza en casa!

Vía: Todo bebé.