Trastorno del sueño: terrores nocturnos en los niños

Las mamás nunca terminamos de aprender, aunque tengamos tres, cuatro, cinco hijos, el aprendizaje con cada uno de ellos es exclusivo y diría yo que hasta interesante. No siempre aprendemos con ellos de la mejor manera, a veces nos asustamos, nos angustiamos, nos entristecemos, porque el sólo imaginarnos que cualquier cosa les pueda ocurrir, nos puede atormentar. 

Debo aclararles que cuando me han ocurrido cosas con mis hijos (que han sido varias), inmediatamente voy a donde Aquel que los creó, a donde Aquel que todo lo puede. Aunque segundos antes de poner la situación en manos de Dios, mi corazón se vea atormentado, siempre cuando acudo a El, siento paz.

Todo esto se los digo porque hace algunas noches mi niño pequeño (que tiene casi tres años), se despierta llorando, asustado, rojizo, con temblores y sudoroso;  diciendo cosas como que "no quiero ir", "no quiero eso" y como negándose a ir a algún lugar como si alguien lo estuviera obligando a hacer algo que él no quiere. Para mi que esto era algo delicado.  Sólo acudí a orar durante y después de cada episodio.

Ayer mi hijo despertó con las mismas características que les comenté más arriba.  Hice lo mismo de siempre: lo abracé, lo acaricié, le digo cosas como: "todo está bien, aquí esta mami, fue sólo un susto por un sueño feo", etc.

Indagué sobre el tema y según los detalles que explican los expertos en la materia,  lo que le puede estar ocurriendo a mi bebé son terrores nocturnos. Aquí les dejo un fragmento de lo que leí y la verdad que esto me dio un gran alivio.

Terrores Nocturnos:

"Un terror nocturno es un trastorno del sueño que se parece a una pesadilla, con la salvedad de que es mucho más espectacular. Aunque los terrores nocturnos pueden asustar bastante a los padres que los presencian, no suelen ser un motivo de preocupación ni el signo de un problema médico subyacente."Durante una noche típica, el sueño pasa por una serie de fases. Cada una de ellas se asocia a una actividad cerebral particular, y la fase de movimientos oculares rápidos (MOR o REM en inglés) es cuando tienen lugar la mayoría de sueños."

Durante un terror nocturno, un niño puede incorporarse y sentarse en la cama súbitamente y ponerse a chillar o gritar como si estuviera sumamente angustiado. La respiración y el ritmo cardíaco se le pueden acelerar, puede empezar a sudar, a agitarse y a comportarse como si estuviera sumamente alterado y asustado. Al cabo de unos minutos o algo más, el niño se calma y se vuelve a dormir plácidamente. A diferencia de las pesadillas, que se suelen recordar, al día siguiente los niños no tienen ningún recuerdo del terror nocturno porque estaban dormidos mientras ocurrió —y no tienen imágenes mentales que evocar.

Los terrores nocturnos están provocados por una hiperactivación del sistema nervioso central (SNC) durante el sueño. Esto puede ocurrir porque el SNC (que regula la actividad cerebral durante el sueño y la vigilia) todavía está madurando. 

Los terrores nocturnos se han descrito en niños que:

• estaban muy cansados, enfermos, estresados o fatigados
• estaban tomando un medicamento nuevo
• dormían en un entorno nuevo o lejos de su casa.

Pienso que lo que le podría estar afectando a mi hijo es que ya no quiere dormir siesta. Se levanta a las 8 am, tengo una agenda un poco loca con la recogida de mis otros dos hijos a la escuela a diferentes horas, y eso le provoca un trastorno en su rutina de dormir su siesta. Esto le ocasiona mucho cansancio y aunque se duerme aproximadamente a las 8:30 p.m. , al parecer se acuesta muy cansado. En este sentido debo hacer algunos arreglos en mi rutina diaria para no poner en juego su siesta. Aun no sé cómo lo haré, pero buscaré la manera.

Este es un niño sano, gracias a Dios, que regularmente duerme bien, come bien, se relaciona, habla como un perico, a sus dos añitos y medio ya controlaba esfínteres, etc. Pienso que hace todo lo normal para un niño de su edad. Entiendo que por estas razones mis preocupaciones han sido las normales.

Por su puesto, no me quedaré solamente confiada con estas informaciones, que aunque las encuentro muy certeras e interesantes para mi caso, entiendo también que debo informar al pediatra sobre lo que ha estado ocurriendo.

Y a ustedes, les ha ocurrido algo similar? anímense y cuéntennos su experiencia.

Si les interesa leer más sobre el tema pueden entrar al siguiente link

http://kidshealth.org/parent/en_espanol/emociones/terrors_esp.html